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Yo no tengo una única respuesta
Tengo varias.
La mitad de la vida. O eso dicen.
Muchos pensamos que llegar a esa edad significa haber aprobado todas las asignaturas que te llevan a la «madurez». Como si de repente entendieras la vida de otra manera.
¿Sabes qué? Es cierto.
A los 50 ves las cosas con una perspectiva que no tenías en tus 30 ni en tus 40.
Yo crucé esa meta hace seis años, y déjame decirte algo: hay descubrimientos y aprendizajes que te golpean como una bofetada. Te voy a contar los más importantes.
1. Respétate.
A los 50 te das cuenta de que has entrado en una fase en la que no todo vale. Especialmente contigo mismo. En el trabajo, muchas veces nos convertimos en nuestros peores jefes: prioridades mal puestas, urgencias inventadas y esa absurda manía de relegar lo importante.
Obligaciones familiares, momentos con amigos, experiencias que no vuelven… Eso es lo importante de verdad.
Todo lo aparcas por urgencias que, sinceramente, a nadie le importan tanto como crees.
Y ahí estás tú, arrastrado por el día a día, sin darte cuenta de que la factura no la paga la empresa, la pagas tú. Con tu tiempo. Con tu vida.
A los 50, si aprendes a poner las cosas en su sitio, empiezas a disfrutar. Y sí, te lo digo con conocimiento de causa: todo mejora. Salud, claridad mental, forma física… Bueno, esta última si no te pasas con los postres.
Pero esa madurez que creías que era un mito, resulta que es real. Te da calma y te enseña a priorizar lo que de verdad importa.
2. El tiempo pasa volando (y más rápido de lo que crees)
¿Te acuerdas de los 20? Se te fueron entre fiestas, sueños raros y trabajos que odiabas. Los 30, en modo «quiero tener éxito pero no sé cómo». Y los 40… Bueno, ahí ya empiezas a pensar en el retiro y en si te dará la vida y tus ahorros para todo lo que quieres hacer.
Y llega el mercado laboral, que a los 50 te dice: «Bueno, tú ya estás para el banquillo.» ¿Perdona? Resulta que, para muchos, ya no eres el perfil que buscan. «Muy mayor para esto», «demasiado lento para lo otro».
Todo patrañas. Pero es lo que hay. Las empresas creen que reciclarse no es lo tuyo, que las nuevas tecnologías no son para ti.
Spoiler: están equivocados. Y tú lo sabes. El problema es que esa narrativa está tan metida en la cabeza de la gente que, a veces, te la empiezas a creer tú también.
3. Disfrutar, pero de verdad
A esta edad, todo tiene otro sabor. Un café con amigos, un paseo sin rumbo, una charla en la que ya te da igual lo que piense el otro… Todo se disfruta de otra manera. Más lenta. Más consciente.
Es una época en la que empiezas a vivir para ti, no para cumplir con expectativas que ni siquiera eran tuyas. Y eso, amigo mío, es liberador.
4. Tus amigos envejecen… tú no (o eso crees)
Este punto me lo dijo alguien hace poco y me hizo mucha gracia: cuando llegas a los 50, empiezas a notar que todos tus amigos envejecen menos tú.
Claro, tú te miras al espejo y piensas: «Bueno, no estoy tan mal.» Mientras tanto, los demás se quedan calvos, se tiñen las canas o descubren arrugas en sitios que ni sabías que existían.
¿Sabes qué? Nos pasa a todos. Es como si tu cerebro se negara a aceptar que el tiempo también va contigo. Y, oye, mientras dure el autoengaño, ¡aprovecha!
Conclusión: los 50 son una pasada
Conozco a mucha gente que ha triunfado después de los 50. Que ha emprendido, que ha encontrado su propósito, que ha logrado cosas que llevaba años persiguiendo. Esa madurez que tanto miedo da resulta ser el secreto para tomar las riendas de tu vida.
Hace unos días publiqué una entrevista con Jesús Alonso Gallo. Tiene sesenta y tantos y, aunque ha pasado por episodios duros, su visión de la vida ahora es una auténtica lección.
Si no la has escuchado, hazlo. Te ayudará a poner las cosas en perspectiva y a entender que siempre se puede aprender, crecer y disfrutar, sin importar la etapa en la que estés.
Y ahora, a por el 2025
Este es el segundo artículo del año, y quiero decírtelo bien claro: tengo grandes esperanzas para este 2025. Creo que nos van a pasar cosas bonitas y que lo vamos a disfrutar muchísimo.
Por mi parte, voy a seguir creando contenido cada día, sin faltar. Entrevistas, posts, lo que haga falta. Si estás por aquí, me encantará que me acompañes en esta aventura.
Vamos a por todas !!!!!!
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