Nos ponemos refraneros: somos lo que comemos y la cara es el espejo del alma. Pues si los unimos, se pueden aplicar ambos gracias a estos cinco alimentos que cuidan, rejuvenecen e iluminan tu piel. Lo importante es que sean saludables, que lo son, pero si además te proporcionan una piel tersa y más joven…

En realidad, lo uno es consecuencia de lo otro. Todo tiene relación e, igual que por los ojos, puedes saber si hay alguna dolencia, lo mismo pasa con los signos y estado de la piel.

La búsqueda de una piel radiante y joven es constante. Aunque el paso del tiempo es inevitable, hay maneras de minimizar sus efectos en nuestra piel. La clave no solo está en los productos cosméticos que aplicas, sino también en lo que comes y eso es lo que te hará tener salud y vivir más.

El salmón, un liado rico en Omega-3

El salmón es más que un delicioso plato, es un superalimento para tu piel. Rico en ácidos grasos omega-3, especialmente DHA, el salmón ayuda a mantener tu piel hidratada, suave y libre de arrugas.

Estos ácidos grasos tienen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, protegiendo tu piel de los daños solares y reduciendo problemas como el acné y la psoriasis.

La avena, una fuente de antioxidantes y zinc

La avena no solo es un excelente desayuno (por ejemplo, en yogur, con unos frutos secos y rojos), sino también es un gran aliado para tu piel. Contiene avenantramida, un antioxidante que combate el envejecimiento prematuro y las arrugas.

Además, el zinc presente en la avena fortalece tu sistema inmunológico, ayudando en el tratamiento de afecciones inflamatorias de la piel.

La naranja, vitamina C para una piel firme

La naranja, una fruta rica en vitamina C, es fundamental para la formación de colágeno, lo que se traduce en una piel más firme y saludable.

Además, contiene betacaroteno y vitamina A, antioxidantes que protegen las células de tu piel contra daños de radicales libres y retrasan el envejecimiento. Que no falte un desayuno con un buen zumo de naranja, junto con la avena anterior.

El camote

El camote te da protección e hidratación. Es un tesoro para tu piel gracias a su alto contenido de betacarotenos. Estos pigmentos, convertidos en vitamina A en el cuerpo, protegen las células de tu piel contra los daños de los radicales libres y los rayos UV, manteniendo tu piel hidratada, firme y joven.

El aguacate, hidratación y elasticidad

El aguacate es famoso por sus grasas saludables y vitaminas C y E, esenciales para mantener tu piel flexible e hidratada. La vitamina C, con su acción antioxidante, combate los radicales libres, estimula la producción de colágeno, y mejora la firmeza y elasticidad de la piel. Ideal para incluir en las ensaladas o untado en una tostada por la mañana.

Consejos para una piel radiante

No obstante, además de incluir estos alimentos en tu dieta, es importante mantener una hidratación adecuada, bebiendo suficiente agua a lo largo del día, otra de las claves. Se recomienda un mínimo de dos litros.

No olvides también la protección solar, esencial para prevenir el envejecimiento prematuro y los daños causados por la exposición al sol, como el agua, durante todo el año. Salir a correr o pasear en invierno al solo daña igual la piel que en periodo estival.