La nueva mujer de 50 años, digna hija de la década de los 60

Jose Manuel Fuentes Prieto julio 21, 2023

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Las mujeres que en la actualidad rondan los 50 años se están convirtiendo en un hito histórico por su forma de afrontar lo que se ha dado en llamar la edad madura. Según los conocimientos de la antigua cultura Maya, a los 52 años comenzamos un nuevo ciclo de vida que podríamos ver como un renacimiento. Es una oportunidad para aprovechar y poner en práctica con sabiduría toda la experiencia anteriormente acumulada.

La nueva mujer de 50 ha aprendido a aceptarse como es, se siente joven y, al mismo tiempo, con experiencia. Y sabe que en la vida la experiencia es un grado.

Estas mujeres nacieron en la década de los 60. Unos años con unas características muy concretas que dejaron huella indeleble en los cerebros de las mujeres que ahora están en la cincuentena. Estas mujeres han caminado hombro con hombro junto a los hombres en la universidad, en el mundo de la empresa y de los negocios. Han luchado por unas condiciones laborales igualitarias y por sus derechos como madres trabajadoras. Son las dignas hijas de los 60, vamos a hablar de ellas, de nosotras.

Los años 60, la década prodigiosa

Los años sesenta es un término usado para describir la contracultura, la revolución en las normas sociales, la caída de los tabúes y la relajación en temas como el racismo y la sexualidad. En esta década se dio una desviación extrema de la norma que hasta ahora había impuesto sus rígidas estructuras, en beneficio de una mayor libertad individual. Es la década en la que la juventud y la mujer adquieren protagonismo. En general aparece una nueva sensibilidad respecto a conceptos como amor, familia, igualdad, feminismo o pacifismo.

Entre los hitos relevantes podemos señalar algunos como:

En 1962 se da la Crisis de los misiles entre Estados Unidos y Rusia que pone al mundo al borde de la Tercera Guerra Mundial, lo que llevó posteriormente al Tratado de Convivencia Pacífica.
Ese mismo año, el Concilio Vaticano II sienta las bases para ciertas reformas con las que la Iglesia Católica intenta ponerse al día.
Es la década del movimiento Hippie con su libertad sexual, el pacifismo y las protestas masivas contra la Guerra del Vietnam bajo el lema “Haz el amor y no la guerra”.
Se asesinan a grandes líderes con un poder mediático nunca visto hasta el momento: John F. Kennedy, Martin Luther King…
El movimiento de Mayo del 68 en Francia, donde comienzan las revueltas estudiantiles contra el orden establecido, que rápidamente se extienden a otras partes del mundo.
En Inglaterra nace el fenómeno Beatle que transforma la música y la forma de relacionarse con ella.
En la China de Mao se vive la Revolución Cultural que supuso la transformación de una cultura milenaria, con un gran cambio de roles para la mujer.
En esta década el hombre pisa por primera la luna.
La píldora se comienza a administrar como anticonceptivo seguro, lo que libera a la mujer de embarazos no deseados y le permite una nueva relación con su sexualidad.

La sopa cuántica que nos alumbró

Así, la generación nacida en estos años está marcada por la misma energía que generó este movimiento de revolución intelectual, social y pacifica que quiso cambiar el mundo. Somos las hijas de estas jóvenes que empezaron a vivir su sexualidad con una nueva libertad y pretendían la igualdad entre los sexos. Que tenían la posibilidad de decidir sobre su descendencia y empezaron a usar el término “hijo deseado”. Somos las cincuentañeras.

Ya sabemos por la epi-genética y la neurociencia que el entorno influye en nuestros genes. Este fue el nuestro, la sopa cuántica que nos alumbró y nos sostiene. La que nos ayuda a ser quienes somos, la cultura que nos volvió revolucionarias y dueñas de nuestras vidas. Una soberanía tantas veces castigada pero que nos ha convertido en resilentes.

Características de las Cincuentañeras

Es una mujer que está en los inicios de la menopausia, pero la vive prácticamente libre de síntomas como sofocos o jaquecas. Para ella no es un trauma la pérdida de la menstruación porque su autoestima y su sexualidad no están basadas en la capacidad de procrear.
Estas mujeres tuvieron hijos antes de la treintena, por lo que éstos ya son mayores de edad. Se sientes libres de las cargas de la maternidad para iniciar nuevos proyectos personales con la energía que antes dedicaban a la crianza.
A esta edad han aprendido a confiar en su intuición, para lo bueno y para lo malo.
También han aprendido que más vale estar sola que mal acompañada. Muchas, son madres de familias monoparentales que se han demostrado, a sí mismas y al mundo, que tienen el valor y la fuerza necesarias para salir adelante por ellas mismas.
Han desarrollado una autoestima que les permite tener más tiempo que sus madres para sí mismas y sus proyectos personales.
El concepto de aprendizaje y formación continua lo llevan bien inoculado lo que las mantiene estudiando y ampliando sus horizontes mentales constantemente.
Tienen un espíritu aventurero que les pone en búsqueda de nuevos límites de forma continua, asumiendo riesgos y probándose a sí mismas que los limites solo son mentales.
Han leído libros de autoayuda y espiritualidad como los de Louise Hay, W. Dyer, Castañeda. D. Chopra, El poder del ahora… lo que les ayuda a tomar sus propias decisiones de forma empoderada. Sobre nutrición, Ayurveda, física cuántica, neurociencia… lo que les abre los límites de su mente de forma antes nunca vista y les hace dueñas de la realidad en la que viven.
Practican deportes en la naturaleza y actividades en grupo, lo que les amplía su mundo de afectos y relaciones. Esto les aporta grupos de apoyo en los que poder sostenerse en momentos delicados.
Acuden a terapia si lo consideran necesario buscando solucionar los conflictos a través del autoconocimiento y el crecimiento personal.
Tienen una mejor relación con su cuerpo y su sexualidad, saben lo que quieren y lo expresan de forma asertiva en la mayoría de los casos.
Cuidan su cuerpo, su mente y su espíritu con ejercicio, dietas y meditación, lo cual, les ayuda a mantener un sano equilibrio y eternamente jóvenes.
Se dan a sí mismas lo que necesitan sin tener que esperar a que alguien se lo dé. Saben que el amor más importante es el amor hacia una misma.
Muchas de estas guerreras han tenido que reinventarse más de una vez, ya que el mundo laboral tiene códigos estrictos de edad. Han sabido buscar nuevos caminos y explorarlos con sentido de aventura y aprendizaje.

Mujeres que portan las semillas del cambio

Estas lindas mujeres que escucharon a los Beatles cuando estaban en el seno de sus madres, que vieron las primeras luces en la época de Mayo del 68, que fueron concebidas bajo el halo de Haz el amor y no la guerra… Estas hermosas y resilentes guerreras, son las que tienen en su poder la barita mágica del cambio. Son las precursoras de los niños índigo, son las que están educando a los veinteañeros que traen la nueva conciencia al planeta en forma de niños cristal, esmeralda, o a los tan mal entendidos TDHA, TGD…

Estas mujeres son las que han asumido ser las madres de los verdaderos revolucionarios, de los que harán La Revolución Ecológica, la única forma de frenar la sinrazón que hoy reina en el mundo.

Estas mujeres, en ningún aspecto se sienten de mediana edad y no reconocen más límites que los que ellas quieran imponerse. Saben que tienen el mundo en sus manos, que la Vida les apoya incondicionalmente. Están dispuestas a seguir viviendo, exprimiendo la vida hasta la última gota.

Mujeres fuertes, mujeres de 50 años, cincuentañeras dignas hijas de los 60.

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