Cada día se valora más la importancia de comer sano. Solo hace falta echar un vistazo en Internet, y en concreto a las redes sociales, para darse cuenta de que el nutricionista que todo el mundo parece llevar dentro florece cada vez con más fuerza e ímpetu. Pero más allá de las dietas, existen recomendaciones que tienen un fin claro: estar más sano y tener más energía.

Este es el objetivo de la llamada regla del 5A, una postura que pretende hacerte más consciente de lo que comes y, en muchos sentidos, conseguir que tu régimen de alimentos te haga vivir más y, sobre todo, mejor. Si somos aquello que comemos, la atención por el detalle se torna fundamental.

¿Qué es exactamente la regla del 5A?

Aunque la regla del 5A pueda tener un nombre extraño, más propio de una comunidad de vecinos que de una recomendación nutricional, en realidad la explicación detrás es de lo más sencilla. Esta dieta, por llamarla de alguna forma, debe ser de la siguiente forma: antiinflamatoria, antioxidante, antihiperglucémico, antidisbiosis y antitóxico.

¿Qué quiere decir esto en realidad? Pues que no se trata solo de comer para alimentarse o por el placer de hacerlo (si bien la regla de 5A no está reñida necesariamente con disfrutar), sino con cabeza, aprovechando alimentos, muchos de ellos de temporada y poco cocinados, para reforzar el organismo y conseguir un extra de energía, además de una salud más sólida.

En algunos aspectos fundamentales, la regla del 5A no se distingue de otras recomendaciones básicas. Una dieta equilibrada es clave para proporcionar al cuerpo los nutrientes esenciales que necesita para funcionar correctamente. Recomienda consumir una variedad de alimentos, como frutas, verduras, proteínas, etcétera.

Además, el tamaño de las porciones es crucial para evitar el exceso de calorías. Es recomendable escuchar a tu cuerpo y comer cuando tengas hambre, pero tratando de mantener porciones moderadas para evitar la sensación de pesadez y la fatiga postprandial. Algo propio de la cultura japonesa: tan importante es el cuánto como el qué.

Qué comer para respetar la regla del 5A

Entrando en materia, la regla del 5A se fundamente, como hemos visto, en diferentes beneficios para la salud. Para tener un régimen antiinflamatorio, es aconsejable el pescado graso, como el salmón y la trucha, ricos en ácidos grasos omega-3, el aceite de oliva o verduras de hojas verdes, como las acelgas o las espinacas.

También habría que incluir legumbres, como lentejas y garbanzos, que tienen un bajo índice glucémico y proporcionan fibra, para cumplir su parte antihiperglucémica; cereales y frutas de temporada para actuar a modo de antidisbiosis, o apostar por el té verde o el jengibre como productos que eliminen las toxinas del cuerpo.

Por último, quedarían los antioxidantes, para lo cual también sería oportuno recurrir a productos naturales como los arándanos, las frutas ricas en vitamina C o frutos secos como las nueces o las avellanas. 

Conviene que sepas que la regla del 5A, en cualquier caso, no es una dieta como tal, sino una forma de entender la nutrición que, de forma sana y equilibrada, te permitirá tener más energía y poder vivir mejor, que al final es de lo que se trata.